Una fractura de clavícula es una rotura del hueso que se encuentra en la parte superior del pecho y que conecta el esternón con el omóplato (escápula).
La clavícula se puede romper de varias maneras. Por ejemplo, se puede fracturar cuando uno se cae sobre el brazo y la mano extendidos, se cae sobre el hombro o recibe un golpe directo en la clavícula.
Sentirá dolor e inflamación en la región donde se produjo la fractura. Tendrá dificultades para mover el brazo o el hombro. Puede haber escuchado el ruido que hace el hueso cuando se rompe.
Su profesional médico le examinará la clavícula para ver si la región está muy sensible o inflamada. La fractura se verá claramente en una radiografía.
Para que no se sienta tan incómodo, es posible que le inmovilicen la clavícula con una venda en forma de 8 para mantener el hombro hacia atrás (como si estuviera en posición de firme). Es posible que le pongan el brazo en un cabestrillo. La clavícula puede tomar de 6 a 12 semanas en sanar.
Es importante que la clavícula sane por completo antes de volver a la práctica deportiva o actividad, para que no se vuelva a romper. Debe poder mover su clavícula, hombro y brazo sin dolor. Es posible que su profesional médico le haga sacar otra radiografía para comprobar que el hueso ha sanado.
Puede empezar a hacer ejercicios de rehabilitación después de que la clavícula haya sanado y el profesional médico le haya dado permiso.
Las fracturas de clavícula se producen en general por accidente y no se pueden prevenir.