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Dolor de la pierna (dolor de la tibia)

Shin Pain (Shin Splints)

¿Qué es el dolor de tibia?

El dolor de tibia es un dolor que se siente en la parte delantera de la pierna, entre la rodilla y el tobillo. Puede sentir dolor directamente en el hueso (la tibia) o en los músculos que están en la parte interna o externa de la tibia. Este tipo de dolor de pierna se llama con frecuencia dolor de la tibia.

¿Cómo ocurre?

El dolor de tibia se produce en general por uso excesivo. Se puede deber a una irritación de los músculos u otros tejidos en la parte inferior de la pierna o a una fractura de esfuerzo. Los corredores que aumentan la distancia de entrenamiento o la intensidad de la corrida, o que cambian la superficie de entrenamiento, pueden sufrir con frecuencia de dolor de la tibia.

Cuando uno camina o corre, el pie se aplasta normalmente un poco cuando golpea contra el piso. Si el pie se aplasta más de lo normal, esto se llama pronación excesiva. La pronación excesiva puede contribuir al dolor de la tibia.

Algunas condiciones específicas que pueden producir dolor de la tibia son:

  • Fractura de esfuerzo: Una pequeña fisura en uno de los huesos inferiores de la pierna, la tibia o el peroné.
  • Síndrome de esfuerzo medial: Los músculos que están conectados a la parte interna de la tibia se inflaman.
  • Síndrome compartimental: El compartimiento anterior es una región de la pierna donde están los músculos que permiten apuntar el pie y los dedos hacia el cuerpo. Cuando se usa este compartimiento excesivamente, los músculos le empezarán a doler.

¿Cuáles son los síntomas?

Sentirá dolor en la parte delantera de la pierna. Puede sentir dolor cuando está descansando, cuando se ejercita, o ambos. Las fracturas de esfuerzo de la tibia le producirán dolor directamente sobre la tibia. Le dolerá la parte del hueso que está fracturada. Las fracturas de esfuerzo del peroné producen dolor en la parte externa inferior de la pierna. Si tiene el síndrome de esfuerzo medial, sentirá dolor y sensibilidad a lo largo del borde de la tibia, sobre todo a lo largo de los músculos. Le dolerán los músculos del compartimiento. El compartimiento anterior también tiene nervios y vasos sanguíneos. Si los músculos del compartimiento se inflaman al hacer ejercicio, pueden llegar a irritarle estos nervios o vasos sanguíneos y hacer que el pie se debilite, se entumezca o se enfríe.

¿Cómo se diagnostica?

Su profesional médico le examinará la parte inferior de la pierna. Determinará qué parte de la tibia le está produciendo el dolor. Le hará caminar o correr para ver si tiene problemas de pronación excesiva. Es posible que le pida una radiografía o una tomografía de los huesos para ver si tiene fracturas de esfuerzo. Si el profesional médico cree que tiene el síndrome de compartimiento, le hará hacer una prueba para medir la presión en los compartimientos de la parte inferior de la pierna. Esta prueba se realiza con una aguja que está conectada a un dispositivo de medición. Le harán la prueba en reposo y después de haber hecho ejercicio.

¿Cómo se trata?

El tratamiento que se le dará puede consistir en:

  • Hielo: Colóquese hielo sobre la pantorrilla por 20 ó 30 minutos cada 3 ó 4 horas durante los primeros 2 ó 3 días o hasta que el dolor desaparezca.
  • Masajes con hielo: Congele agua en un vaso de espuma plástica. Pele la pared superior del vaso para exponer el hielo y frótese la pierna por 5 a 10 minutos agarrando el vaso por el fondo.
  • Medicamento: Tome los medicamentos antiinflamatorios recetados por su médico.
  • Soportes para los zapatos: Soportes de arco (ortopédicos) para ayudar a corregir la pronación excesiva. Puede hacérselos a medida con una receta del médico o comprar soportes ya hechos en su farmacia local.
  • Ejercicios de rehabilitación.
  • Cirugía: Si tiene el síndrome de compartimiento, es posible que haya que operarlo. Durante la operación le abrirán los tejidos que cubren el compartimiento para reducir la presión. A veces también habrá que operarlo si tiene una fractura de tibia.

Mientras se está recuperando de la lesión, practique un deporte o actividad que no empeore su situación. Por ejemplo, puede nadar o andar en bicicleta en vez de correr. Cuando empiece a correr de vuelta, use calzado bueno y corra sobre superficies blandas.

¿Cuándo puedo volver a practicar mi deporte o actividad?

El objetivo de un programa de rehabilitación es que usted pueda volver a practicar su deporte o actividad en forma segura lo antes posible. Si vuelve a practicar demasiado temprano, su lesión se puede agravar, con el peligro de que el daño sea permanente. Cada persona se recupera de su lesión a un ritmo diferente. Su retorno a la práctica deportiva o actividad dependerá de cuán rápido se recupere su pierna y no de cuántos días o semanas han transcurrido desde su lesión. En general, cuánto más tiempo tarde en iniciar su tratamiento después de tener síntomas, más tiempo tardará en sanarse.

Podrá retornar al deporte o actividad cuando pueda hacer lo siguiente, en el orden en que aparece en la lista:

  • Puede mover la pierna lesionada en todas las direcciones de la misma manera que la pierna que está sana.
  • Tiene la misma fuerza en la pierna lesionada que en la pierna que está sana.
  • Puede correr despacio en línea recta sin sentir dolor ni renguear.
  • Puede correr en línea recta sin sentir dolor ni cojear.
  • Puede girar 45 grados, primero corriendo despacio y después a toda velocidad.
  • Puede formar un ocho en un recorrido de alrededor de 20 yardas, primero corriendo despacio y después a toda velocidad.
  • Puede girar 90 grados, primero corriendo despacio y después a toda velocidad.
  • Puede formar un ocho en un recorrido de alrededor de 10 yardas, primero corriendo despacio y después a toda velocidad.
  • Puede saltar con ambas piernas sin sentir dolor y puede saltar sobre la pierna lesionada sin sentir dolor.

¿Cómo se puede prevenir el dolor de la tibia?

  • Dado que el dolor de pierna en general se produce por uso excesivo, empiece sus actividades en forma gradual.
  • Use calzado con suficiente acolchado.
  • Corra en superficies más blandas.
  • Haga ejercicios de precalentamiento y estírese los músculos de la parte delantera de la pierna y de la pantorrilla.
  • No corra cuando tenga dolor de la tibia porque va a tardar más tiempo en sanarse.

Escrito por el Dr. Pierre Rouzier para iMcKesson Clinical Reference Products.

Este material se revisa periódicamente y está sujeto a cambios en la medida que aparezca nueva información médica. Se proporciona sólo para fines informativos y educativos, y no pretende reemplazar la evaluación, consejo, diagnóstico o tratamiento médico proporcionados por su profesional de atención de la salud.
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